Brindo por cada borrachera, por cada fiesta, por
cada tarde de no hacer nada. Brindo por cada comida, cena y noche de desvelo. Brindo
por todo lo que hemos llorado, por todo lo que hemos reído. Brindo por esos
abrazos de apoyo, por esas manos tendídas para levantarnos del suelo. Brindo por
las palabras de ánimo, consejos y ayuda. Brindo por la estupidez humana, por
lo perfectas que sois.
Brindo por todos los que ya estaban y permanecen, por los
que vinieron y se fueron, por los que han
venido para quedarse y por los que vendrán.
No hay comentarios:
Publicar un comentario